No arrepentirse de nada en la vida, al más puro estilo Edith Piaff suena a personalidad auténtica y arrolladora. Sin embargo, más allá de la canción, seamos honestos: asumir las consecuencias de todos nuestros actos pasados con la cabeza bien alta, actitud positiva y nulo remordimiento no es lo más habitual ni desde luego lo más fácil.
Pensemos en un enfermo terminal, por ejemplo. Cuando la cuenta atrás que es la vida se materializa en un cronómetro real, concreto e inminente, ¿cómo no pensar en qué habrías hecho de otra forma en el pasado?
Hace casi una década, Bronnie Ware, una enfermera australiana especializada en cuidados paliativos, publicó The Top Five Regrets of the Dying (Random House, 2013), un curioso libro donde recopila los cinco arrepentimientos más habituales entre sus pacientes.
En todos ellos aparece el pretérito pluscuamperfecto como una pesada losa en forma de lección aprendida demasiado tarde. Una especie de fantasma de lo que pudo haber sido y ya no será. Todas estas personas coinciden en expresar su pesar no tanto por lo que hicieron (pretérito indefinido) sino por lo que desearían haber hecho (pretérito pluscuamperfecto).
Analicemos estos arrepentimientos desde el punto de vista lingüístico:
“Ojalá hubiera tenido el coraje de hacer lo que quería hacer.”
Estructura Ojalá + pretérito pluscuamperfecto de subjuntivo, para expresar un deseo en retrospectiva.
“Ojalá no hubiera trabajado tanto.”
Se repite la misma estructura, pero con la negación: Ojalá no + pretérito pluscuamperfecto de subjuntivo, para lamentar algo que se hizo en el pasado.
“Lamento no haber podido expresar mis sentimientos”
Aquí nos encontramos con la estructura Verbo de arrepentimiento + infinitivo pluscuamperfecto, dentro del cual aparece una perífrasis: poder + infinitivo (“no haber podido expresar”)
“Me arrepiento de no haber tenido más contacto con los amigos.”
La misma estructura de arrepentimiento, solo que con el verbo preposicional arrepentirse (de algo)
“Tendría que haberme permitido ser más feliz.”
De nuevo una perífrasis (tener que + infinitivo) para la estructura Condicional (debería, tendría que) + pretérito pluscuamperfecto para expresar una obligación en retrospectiva. También destaca el uso reflexivo de permitir à permitirse (a sí mismo) hacer algo.
Bronnie afirma que su propio planteamiento de vida cambió a través del de la sabiduría final de estas personas. Por eso, para las píldoras de hoy, te propongo un ejercicio lingüístico, pero sobre todo terapéutico: ¿Y si transformamos cinco deseos retrospectivos en cinco consejos imperativos?
No desees haberlo hecho: ¡Hazlo!
Las píldoras de hoy:
Ten el coraje de hacer lo que quieres hacer
No trabajes tanto
Expresa tus sentimientos
Cuida más a los amigos
Permítete ser MÁS feliz